Las autoridades de Bangkok emplearon un elevador industrial y derribaron dos paredes para poder transportar al hospital a una de las mujeres más obesas del mundo. La tailandesa de 40 años tiene 274 kilos de peso y necesita una cura urgente por un tumor en la pierna.
En vísperas de este operativo el alcalde de la capiral de Tailandia, Sukhumbhand Paribatra, junto con otros funcionarios del municipio visitó el condominio en el que vivía la mujer. La situación exigió que decidieran el uso de maquinaria especial para sacar a la mujer de su casa, de la que no había salido en tres años.
Amnuayporn Thongprapai —así se llama la tailandesa— podía andar sola, aunque siempre apoyándose sobre uno de sus hijos adoptivos y sólo para ir de su habitación al cuarto de baño. Debido a eso, los empleados municipales tuvieron que sacarla primero al pasillo y de allí a una vivienda vacía a la que tuvieron que derribarle paredes para sacarla a la calle. Por fuera del orificio, a nivel de la segunda planta donde estaba su departamento, la esperaba un elevador que se usa para las obras de construcción.
Toda la operación fue asegurada por un equipo de bomberos.
Mientras dura su tratamiento en el Hospital Central de Bangkok (tanto del tumor, como de la obesidad extrema), la mujer confió el cuidado de sus dos hijos adoptivos a los vecinos del condominio. Al respirar un poco al aire libre expresó su deseo de poder ir de nuevo a la playa para jugar con el mar.